10% de descuento por transferencia - 2 cuotas sin interés
El interés de los niños por las actividades de la cocina indica que allí pasa algo importante para ellos.
La cocina, con su doble cualidad de espacio creativo y riguroso, es un ámbito estimulante para curiosear e investigar, para imaginar, disfrutar y también para ordenarse.
La organización del manual se inspiró en el modo en que están organizadas muchas clases de cocina para niños, con el objetivo de ejercitarlas. La primera sección enumera consejos para facilitar una buena experiencia y ayudar en los primeros pasos en la cocina, haciendo foco también en las normas
de seguridad.
El recetario comienza descubriendo los distintos comercios donde se consiguen los ingredientes principales con los que se preparan las recetas. Luego se presentan las técnicas básicas de cocina para ir familiarizándose con ellas. A través de las recetas, los niños aprenderán a lavar, medir, mezclar, batir, amasar, pisar, adornar y mucho más.
El libro propone valorar la comida sana, base de una buena salud, sin caer en fundamentalismos. Algunas recetas resultarán más conocidas y otras parecerán novedosas. Incluye los clásicos barquitos de huevos rellenos, licuados de frutas y helados con palito; y otras recetas menos conocidas como la leche de almendras, el pan de maíz, los popovers ("bombas monstruos"), las bolitas de arroz, el budín de yogur y la torta cebra. Son más de 50 opciones e ideas para ir probando, disfrutando y aprendiendo.
Ilustrado por la artista argentina Johanna Wilhelm con papercuts (una técnica de papel recortado), el manual resulta una colorida, imaginativa y delicada edición para compartir con niños de 3 años en adelante.
Edición: tapa blanda con solapas
Tamaño: 24x17 cm
Cantidad de páginas: 104
Tipografía: imprenta minúscula
$23.000,00
10% de descuento pagando por transferencia bancaria ó efectivo
SIN STOCK
El interés de los niños por las actividades de la cocina indica que allí pasa algo importante para ellos.
La cocina, con su doble cualidad de espacio creativo y riguroso, es un ámbito estimulante para curiosear e investigar, para imaginar, disfrutar y también para ordenarse.
La organización del manual se inspiró en el modo en que están organizadas muchas clases de cocina para niños, con el objetivo de ejercitarlas. La primera sección enumera consejos para facilitar una buena experiencia y ayudar en los primeros pasos en la cocina, haciendo foco también en las normas
de seguridad.
El recetario comienza descubriendo los distintos comercios donde se consiguen los ingredientes principales con los que se preparan las recetas. Luego se presentan las técnicas básicas de cocina para ir familiarizándose con ellas. A través de las recetas, los niños aprenderán a lavar, medir, mezclar, batir, amasar, pisar, adornar y mucho más.
El libro propone valorar la comida sana, base de una buena salud, sin caer en fundamentalismos. Algunas recetas resultarán más conocidas y otras parecerán novedosas. Incluye los clásicos barquitos de huevos rellenos, licuados de frutas y helados con palito; y otras recetas menos conocidas como la leche de almendras, el pan de maíz, los popovers ("bombas monstruos"), las bolitas de arroz, el budín de yogur y la torta cebra. Son más de 50 opciones e ideas para ir probando, disfrutando y aprendiendo.
Ilustrado por la artista argentina Johanna Wilhelm con papercuts (una técnica de papel recortado), el manual resulta una colorida, imaginativa y delicada edición para compartir con niños de 3 años en adelante.
Edición: tapa blanda con solapas
Tamaño: 24x17 cm
Cantidad de páginas: 104
Tipografía: imprenta minúscula